Desde tiempos antiguos las
sociedades han adoptado las funciones de gerencia, a pesar de que no conocían
tales actividades con el término que hoy en día se emplea. La gerencia en si ha
evolucionado al pasar los tiempos, creando un conjunto de ideales que han
demostrado ser eficientes e independientes en diferentes organizaciones, dicho
término es atribuido a una persona que ocupa el cargo de gerente, esto es, quien
lleva la gestión administrativa de una organización, además, la gerencia
según Megginson (2001), “se puede definir como el poder trabajar con personas
para determinar, interpretar y alcanzar los objetivos organizacionales,
desempeñando las funciones de planeación, organización, dirección y control”.
Las organizaciones educativas están
relacionadas con instituciones donde se cumplen con normas y procedimientos
administrativos, en las cuales se ejecutan diferentes procesos para lograr un
buen funcionamiento. Cuando se habla de una organización que se ocupa de la
tarea educativa Soto (2001), la define, como “la observación, la
caracterización y la relación de los hechos de la estructuración de los
servicios regulares de enseñanza, así como los modos de organizarlos y
dirigirlo articuladamente”, esto se debe a la necesidad de llevar una
sistematización para cumplir el propósito por el cual fue creada dicha
organización.
Es por ello que, en toda institución
es necesario la integración entre los diversos participantes para lograr un
buen desarrollo de las actividades y cumplimiento de diferentes proyectos,
alcanzando así, las metas establecidas desde el cuerpo directivo hasta el
personal docente, en este sentido, Beltrán (2006) define la gerencia educativa como
“una acción que promueve la interacción del personal y puede ser explicada a
través de una situación de acción extraída de la dinámica gerencial del
plantel”.
De igual manera, García (2014)
define la gerencia educativa como “el proceso de organizar y empleo de recursos
para lograr los objetivos preestablecidos a través de una eficiente
organización donde el gerente educativo debe dirigir su equipo hacia el logro
de los objetivos de la organización” es notable que se debe tener el control de
los elementos incluidos en las
organizaciones, se demanda que el gerente se encargue de evaluar, planificar,
coordinar y estimular a su personal para promover un conjunto de habilidades y
alcanzar la calidad pedagógica, eficiencia administrativa y servicio a la
comunidad.
La importancia de la gerencia
educativa es fundamental en las organizaciones de enseñanzas, estas son
integradas por individuos que asumen diferentes papeles, estudiantes, obreros,
docentes y administrativos, estos se involucran para desarrollar los diferentes
elementos que se encuentran en el funcionamiento interno de la organización
tales como, programas académicos, concejo del personal, procedimientos
estudiantiles, disciplina, investigación pedagógica, horarios y diversas
actividades educativas.
Esto significa que el gerente educativo debe tener un
desempeño que implica una variedad de exigencias y aptitudes de sí mismo, sobre
todo unas cualidades precisas que le sean útil para dirigir con eficiencia,
además, ser sensato al tomar en cuenta un recurso muy importante como lo es el
ser humano; como explica, Martos nathaly (2013) “el gerente educativo debe
dirigir su equipo hacia el logro de los objetivos de la organización pero
durante una continua motivación donde estimule ,
inspeccione, oriente y premie constantemente la labor desarrollada a
la vez de ejecutar la acción y función de gerente”.
El reto en la gerencia
educativa es crear un ambiente innovador dentro de las organizaciones, donde se
tome en cuenta las necesidades actuales, para lograr el disfrute de una
educación de calidad y capaz de mejorar
al ser humano en todo su significado, todo esto motivado a las buenas prácticas
de la gerencia organizacional, tales como, identificación y organización de las
diferentes actividades que serán desarrolladas en grupos, y formulación de
planes para alcanzar los objetivos a través del uso de los recursos; Chacón y
Rangel (2009), plantean que “el gerente educativo conduce las entidades
educativas y se vale de las funciones de planificación, organización, dirección
y control”.
En ese mismo sentido, es
importante que en la educación exista un gerente y un entorno organizado donde
las personas que lo conforman desempeñen un
trabajo eficiente para lograr un buen funcionamiento en la organización,
por su parte, el gerente debe mostrar interés para que su equipo de trabajo y
la comunidad estudiantil se sientan bien con su labor, sin embargo, su función
también abarca poder desarrollar una buena comunicación, medir las fortalezas y
amenazas en la organización educativa; teniendo como visión lograr una gerencia
eficaz y de calidad, puesto que esta favorece a los centros educativos y logra
sólidos resultados que ayudan a alcanzar las tareas planificadas de forma dinámica.
Finalmente, dentro de las
organizaciones educativas se debe promover una actitud gerencial en el cuerpo directivo
para ejercer sus funciones de responsabilidades
y dirigir la institución de manera eficiente; adicionalmente el gerente
educacional está en la obligación de llevar a cabo un desarrollo personal que
le permita estar a la vanguardia en la aplicación de las actitudes gerenciales
y entrenarse continuamente para tomar decisiones en situaciones de dificultad
para el bien de la organización.
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